
Como ya expliqué en Así se hizo: «Los muertos no se ahogan», uno de los motivos que me llevó a escribir esta novela fue dar a conocer el lugar en el que me críe y en el que pasé buena parte de mi infancia y adolescencia.
Creo, sinceramente, que es un lugar que todo el mundo debería conocer, por eso he decidido realizar esta entrada y mostraros algunos de los lugares que salen en la novela. Así, lo que los conozcan podrán recordarlos y los que no hayan estado nunca tal vez tengan deseos de hacerlo. Sin duda, merece la pena.
«Pinchando en los enlaces podréis acceder a la situación de cada lugar en el Google Maps».
Situado a mitad de camino entre Ribadesella y Llanes, Nueva de Llanes es el epicentro de la historia, el pueblo en el que se crio el protagonista y al que regresa para ayudar en la resolución de un asesinato que despertará oscuros fantasmas del pasado.
He querido resaltar dos escenarios:
– La plaza del pueblo, en la que se aprecian el hotel y el bar que se describen en la novela (aunque con otro nombre y distinta decoración).
– La casa del Conde de La Vega del Sella, de la cual podemos ver la puerta de acceso.
Cuevas del Mar está situada a dos kilómetros y medio de Nueva. En verano se puede acceder en coche solo hasta el parking situado en sus inmediaciones, dada la gran afluencia de gente.
La playa de Canal está situada a menos de un kilómetro de Villanueva de Pría y solo es de acceso peatonal.
Uno de los escenarios claves de la novela es la ermita de San Antonio. Su acceso es peatonal y desde ella se puede contemplar buena parte de la costa llanisca.
Lugar recóndito y no demasiado conocido, Cobijeru es una playa interior situada en un enclave maravilloso y a la que se llega por un camino no menos mágico.
La brugmansia arbórea, floripondio o árbol de las trompetas es muy común en Asturias y en especial en Nueva de Llanes, donde está presente en muchas casas.
Como dije al principio, lo mejor es conocer los lugares por uno mismo y recorrerlos como hacen los personajes de la novela, ya que las fotografías no les hacen justicia.
